Taiwán clausuró Proyecto sobre Producción de Cítricos libres de Plagas
En el Vivero de Plantas Sanas de Cítricos, ubicado en el Centro de Investigación, Producción y Experimentación de Enseñanza Agropecuaria (Cipea) de la Finca “el Plantel”, se llevó a cabo este 13 de diciembre, la clausura del proyecto “Fortalecimiento de la región del OIRSA en el control del Huanglongbing (HLB) y la implementación del manejo integrado de plagas (MIP) en cítricos”, desarrollado en 7 países de Centroamérica incluyendo a Nicaragua, dicha actividad fue presidida por el Embajador de la República de China (Taiwán) Jaime Chin-Mu Wu, el Representante de OIRSA en Nicaragua Willi Flores Díaz, el Director Ejecutivo del IPSA Ricardo José Somarriba y el Vicerrector de la Universidad Nacional Agraria (UNA) Alberto Sediles Jaen.
Este proyecto se ejecutó en conjunto con el gobierno de Taiwán, a través del Fondo Internacional de Cooperación para el Desarrollo (ICDF) y el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA), y tenía como fin, proteger y preparar a los productores centroamericanos con técnicas adecuadas e innovadoras en la detección contra el HLB, con el propósito de mejorar la capacidad productiva de 2.5 millones de plantas sanas por año, 1.7 millones de toneladas de producción y el aseguramiento de 177,524 empleos directo e indirectos.
Nicaragua, como parte del proyecto, durante los 4 años de ejecución logró la construcción e instalación de un invernadero, con capacidad de producir 80 mil yemas de cítricos sanos y 40 mil plantas comerciales por año, también a través de la asistencia técnica de especialistas de Taiwán, se capacitaron a más de 700 citricultores y viveristas.
El Embajador Wu, afirmó que Taiwán en estos años se ha sentido satisfecho por acompañar y fortalecer los conocimientos de los productores y del sector agropecuario de la región centroamericana y especialmente de Nicaragua, en su lucha contra las enfermedades cítricas. Así mismo, aseguró que a través de la utilización de tecnología adecuada y un manejo integral, se logrará un mayor rendimiento e industrialización de los cultivos, resultando altamente beneficioso para las familias productoras nicaragüenses y para la economía del país.
El proyecto tuve una inversión de 6.6 millones de dólares, de los cuales Taiwán a través del ICDF contribuyo con 4.9 millones de dólares.