El calcio en los productos lácteos
Uno de nuestros objetivos más importantes es estar sanos y fuertes, por lo que todos los días procuramos consumir alimentos que nos provean vitaminas, proteínas y otros elementos esenciales para nuestro óptimo desarrollo. En anteriores ocasiones hemos resaltado que los lácteos son parte de esos alimentos porque además de tener vitamina A, también nos proveen de magnesio, potasio y calcio.
Pero, ¿qué es el calcio? Es un macromineral importante en nuestro cuerpo, de hecho, es el más abundante y nos ayuda a mantener fuertes nuestros huesos y dientes. Para que el calcio pueda absorberse de una manera óptima, debe estar presente la vitamina D, otro elemento que encontramos en la leche y otros productos lácteos.
¿Sabías que un vaso de leche aporta el 34% del calcio que requiere diario nuestro cuerpo? Además, el calcio presente en la leche, el yogurt y otros lácteos es fácil de aprovechar por el cuerpo. Debido a la cantidad de calcio que contiene un vaso de leche, consumir uno o dos vasos al día durante la niñez y la adolescencia, ayudará a construir huesos fuertes, y en la edad adulta ayudará a prevenir la osteoporosis. Además, consumir leche en nuestra vida adulta, junto con un estilo de vida activo, también es importante para ayudar a no perder masa ósea y mantener sanos nuestros dientes.
El calcio también es importante para las mujeres en su etapa de gestación. Cuando una mujer está embarazada debe consumir bastante calcio por la formación del bebé que se desarrolla en su vientre y porque su cuerpo se lo requiere. De lo contrario, el calcio que tiene su organismo será absorbido por su bebé y los huesos de la madre perderían fuerza.
Así que ya conocemos un poco más de este elemento presente en los productos lácteos y de la importancia de su consumo. Es importante recordar que además de tener una adecuada alimentación, también es importante practicar al menos 30 minutos diarios de ejercicio físico.