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Suelos en Nicaragua están perdiendo fertilidad, según estudio


Los suelos de Nicaragua han venido perdiendo su fertilidad en las últimas décadas, a causa del manejo inadecuado de los mismos, al despale, la erosión y por efecto del cambio climático, según un estudio realizado recientemente por expertos de una empresa nicaragüense.


Por esos factores la materia orgánica del suelo ha entrado en un proceso de disminución, lo que ha impactado en la productividad de los cultivos en Nicaragua.


En este país actualmente sólo el 10% de los productores realizan estudios de suelo; esto debido a que los costos son muy elevados y la mayoría de agricultores no cuentan con el capital para realizarlos.


Tomando esto como base y con el fin de brindar soluciones específicas a los productores, un equipo de especialistas de la empresa nicaragüense del sector agroquímicos Rappaccioli McGregor (RAMAC) llevó a cabo un estudio de suelo en distintas áreas del país, donde se cultiva arroz, café, maní, frijol, maní, hortalizas y productos no tradicionales como el cacao.


Para ello, el equipo técnico realizó un mapeo de las zonas según la importancia de los cultivos y se recolectaron más de 3,000 muestras del suelo en esas áreas de producción agrícola.


Durante la recién pasada Feria Expo APEN 2017 celebrada en Managua, los ingenieros David Arguello y Danilo Salamanca, de RAMAC, impartieron una charla donde presentaron algunos detalles del resultado del estudio y destacaron la importancia de la asistencia técnica que los productores deben recibir para alcanzar una mayor productividad de sus cosechas.


RAMAC precisamente brinda asistencia técnica por medio de sus técnicos agrónomos a productores de esas zonas agrícolas para promover un uso más racional y adecuado de los suelos. Además, esta empresa ha desarrollado fórmulas que brindan a las plantas elementos como fósforo, nitrógeno y potasio de manera efectiva para así incrementen su productividad.


Una de las fórmulas desarrolladas es NUTRIRAMAC, destinada para un cultivo en específico y la zona, que aporta los nutrientes necesarios a las plantas para devolverles su vigor y que el resultado se vea reflejado en un mayor rendimiento de la cosecha.


“Cuando una planta tiene una mejor nutrición, tiene un mejor desarrollo, se enferma menos, es más resistente al ataque de plagas y está predispuesta a producir más y con mejor calidad” explicó Arguello.


RAMAC cuenta con un equipo de técnicos especializados que ofrecen asesorías de calidad para apoyar a los productores nicaragüenses brindándoles transferencias tecnológicas que mejoran el rendimiento de sus cultivos.

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