El rol de la Banca de Desarrollo en Nicaragua
Generalmente, cuando los nicaragüenses escuchan el término “banco”, inmediatamente lo asocian con el concepto de banca comercial, referido a aquellas instituciones con las cuales el público en general opera, es decir aquellas entidades que financian a la población una casa, un vehículo, en donde tienen sus tarjetas de crédito o manejan sus cuentas de ahorro.
El sistema bancario nicaragüense está constituido principalmente por bancos comerciales, por lo cual en muchos casos se asume que un banco de desarrollo tiene una función similar.
Por este motivo se hace necesario informar al público en general sobre el concepto y rol de un banco de desarrollo, y de manera particular sobre la estrategia con la que opera el BFP en nuestro país.
Para comprender este concepto, es necesario aclarar que los bancos de desarrollo en muchos casos suelen ser instituciones de segundo piso, es decir, que la canalización de los recursos financieros hacia el público se realiza a través de la ventanilla de una entidad intermediaria, ya sea esta un banco comercial, una cooperativa o una micro financiera. Como su nombre lo indica, dicha entidad actúa intermediando los fondos del banco de desarrollo para llegar al cliente final.
Por otro lado, en muchos casos la banca de desarrollo se enfoca en tener un comportamiento contra cíclico, es decir en cerrar brechas en el mercado que la banca comercial no cubre.
En otras palabras, un banco de desarrollo se enfoca en proveer al país de un tipo de financiamiento para rubros específicos que no estén siendo suficientemente asistidos por el sistema financiero, en pro de fomentar el crecimiento económico. En nuestro caso, para Nicaragua, BFP actúa tanto como banco de segundo piso, así como también de primer piso.
Nuestra institución tiene la misión de promover la competitividad del país, apoyando el desarrollo de los sectores productivos con el fomento a la inversión, el emprendimiento, la innovación Nicaragua tecnológica y el fortalecimiento del capital humano.
Nosotros canalizamos financiamiento a través de nuestras tres líneas de negocio: cartera directa, cartera de segundo piso y de fondos administrados en fideicomiso. De esa manera llegamos a los pequeños y medianos productores, así como a sectores productivos de la economía y a proyectos de impacto en el desarrollo del país.
Otro elemento importante de los bancos de desarrollo es atraer y apoyar la inversión extranjera, ya sea privada, de la comunidad internacional, o a través de acuerdos multilaterales. En ese contexto, en Nicaragua el BFP está posicionado como el aliado estratégico de los organismos multilaterales que canalizan recursos hacia el país.
De manera general, la estrategia del BFP como banco de desarrollo consiste en establecer una institución altamente profesional, que implemente nuevos productos y lidere el financiamiento a segmentos con un alto impacto en la economía y el desarrollo de Nicaragua.
CFA, Daniel Otazo Fagalde Gerente General Banco de Fomento a la Producción