Magistrados de la CSJ rinden homenaje al Padre Miguel D’Escoto
Los magistrados de la CSJ realizaron Guardia de Honor, durante los funerales del destacado diplomático nicaragüense (Q.E.P.D.).
Las y los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, encabezados por su presidenta, doctora Alba Luz Ramos Vanegas, asistieron este nueve de junio al homenaje póstumo en memoria del Padre Miguel D’Escoto Brockmann (Q.E.P.D.), Canciller de la Dignidad Nacional.
La presidenta y los magistrados de este poder del Estado, doctores Marvin Aguilar García, vicepresidente, Rafael Solís Cerda, Francisco Rosales Argüello, Yadira Centeno González, Juana Méndez Pérez, Ileana Pérez López y Gerardo Arce Castaño, se hicieron presentes en el Ministerio de Relaciones Exteriores, para realizar guardia de honor ante el féretro del destacado diplomático y revolucionario nicaragüense.
La presidenta de este órgano judicial entregó a la familia doliente el acuerdo número 59 emitido por este ente estatal, donde se destaca la labor invaluable del Padre Miguel.
“Jugó un papel fundamental en el proceso de paz abierto con los Acuerdos de Esquipulas, encaminados a poner fin a los conflictos armados internos; recaudó ayuda para las víctimas del terremoto de 1972 y fue un comunicador y conciliador permanente, compromiso que mantuvo hasta sus últimos minutos sin dobleces ni cansancio en el camino de la dignidad, con una fe inamovible por la restitución de derechos de los más necesitados”, manifiesta el Acuerdo de Pésame del Poder Judicial.
Por su parte, el magistrado Rafael Solís Cerda recordó el legado invaluable de amor y humildad que caracterizaba al destacado diplomático, político, sacerdote y miembro de la revolución nicaragüense, quien falleció este jueves 8 de junio a los 84 años de edad.
La presidenta y el vicepresidente de la CSJ, doctores Alba Luz Ramos Vanegas y Marvin Aguilar García entregaron a los familiares del Padre Miguel el acuerdo numero 59 emitido por este órgano judicial.
“El Padre Miguel nos deja a todo un legado invaluable de amor y humildad, de dignidad, principios y valores. Él fue un baluarte en la primera etapa de la Revolución levantando en alto la bandera de la dignidad nacional”, expreso el doctor Solís.
El padre Miguel D’Escoto fue reconocido como el Canciller de la Dignidad Nacional, se desempeñó como Ministro de Relaciones Exteriores, Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Asesor para Asuntos Limítrofes y de Relaciones Internacionales de la Presidencia, Funcionario del Consejo Municipal de Iglesias y creador de la Fundación Nicaragüense pro Desarrollo Comunitario Integral, entre otros.
Por sus aportes a la revolución nicaragüense fue merecedor de la Orden “Augusto C. Sandino” y la Orden “Carlos Fonseca Amador”.