La leche, nuestra aliada en el embarazo
El embarazo es uno de los procesos más bellos que podemos vivir las madres y también es un proceso de mucho cuidado. Es en esta etapa cuando se desarrolla nuestro bebe y la alimentación que tengamos puede influir mucho en ese desarrollo y crecimiento. Por esto y mucho más la leche puede ser nuestra gran amiga y aliada.
Todas las mujeres embarazadas esperamos aportar los nutrientes esenciales a nuestros hijos e hijas durante los nueve meses de gestación y sabemos que una parte importante de las proteínas, vitaminas, minerales y el calcio necesario para el bebé los podemos encontrar en la leche y productos lácteos.
La leche en cualquiera de sus presentaciones: entera, light, semi y descremada contiene calcio, un nutriente esencial para la formación de los huesos de nuestro bebe, y es un punto de gran importancia, ya que, si no hay suficiente calcio en la dieta para cubrir las necesidades de mamá y bebé, entonces los huesos del bebé se formarán a partir del calcio de los huesos de la madre, descalsificándolos, por ello es muy importante tener un consumo suficiente de calcio. Dos vasos de leche contienen alrededor de un 68% de la cantidad recomendada de calcio que debemos consumir diariamente.
Un bajo consumo de leche también se ha asociado con un mayor riesgo de bajo peso al nacer.
La leche también ayuda con el bienestar de la madre, el consumo de este alimento y de otros lácteos nos pueden ayudar a reducir las posibilidades de padecer de diabetes, hipertensión y hasta de sufrir preeclampsia, evitando así poner en riesgo nuestra vida y la que llevamos en nuestro vientre.
Los alimentos lácteos también son importantes en el embarazo por su contenido de nutrientes que permiten que la madre en la etapa de gestación tenga una buena regeneración de tejidos. Asimismo, la leche y los derivados ayudarán a la madre y al bebé a controlar mejor su peso corporal.
