Un Cielo Seguro y Sin Fisuras
Con el objetivo de cumplir con las normas internacionales de seguridad de la aviación, Taiwán ha aspirado a participar en la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI). De hecho, durante muchos años, Taiwán ha trabajado conjuntamente con otros países del mundo para mejorar la seguridad, calidad y eficiencia de los servicios aéreos internacionales. Por ejemplo, en el preámbulo de la reciente firma del Acuerdo de Servicios Aéreos entre Taiwán y Nicaragua, los dos gobiernos afirmaron estar “dispuestos a cumplir con la Convención de Aviación Civil Internacional, deseando asegurar el más alto grado de protección y seguridad en los servicios aéreos”.
Taiwán se encuentra situado en la zona aérea con más actividad del Este de Asia, convirtiéndose en una parte importante de la red mundial de aviación. Según el Consejo Internacional de Aeropuertos, en el año 2015 el Aeropuerto Internacional de Taoyuan en Taiwán se situó en la 11ª y 6ª posición mundial en cuanto al volumen de pasajeros y volumen de carga, respectivamente, siendo uno de los aeropuertos de mayor actividad de la región. En ese mismo año, 74 compañías aéreas ofrecieron sus servicios hacia y desde Taiwán, operando vuelos regulares de pasajeros y de mercancías en 301 rutas y conectando 135 ciudades del mundo. Además, la Región de Información de Vuelo de Taipei, administrada por Taiwán, tramitó más de 1,53 millones de servicios de control de tráfico aéreo y atendió a 58 millones de pasajeros de entrada y salida en 2015, funcionando como una parte indispensable de la red de transporte aéreo mundial.
Durante más de cuatro décadas, las autoridades competentes de aviación civil de Taiwán, se han esforzado y han invertido muchísimo en tiempo y preparación, en términos de eficacia, coste y operación, por cumplir con las normas de seguridad y protección aéreas establecidas en los reglamentos de la OACI. La seguridad aérea, los servicios de navegación, la protección medioambiental y las cuestiones económicas son motivo de gran preocupación para la OACI, y los desafíos que plantean deben ser abordados a través de una estrecha cooperación entre todos los países. Por ello, la participación de Taiwán en la OACI es una necesidad de vital importancia.
Después de muchos años de esfuerzo, en el año 2013 Taiwán fue invitado a asistir a la 38ª Asamblea de la OACI gracias al apoyo de un grupo de países amigos, incluyendo a Nicaragua, los países europeos, los Estados Unidos y otros países. Taiwán aspira continuar participando en las diversas reuniones y actividades de la OACI de una manera profesional y constructiva. Y asume la responsabilidad de salvaguardar la seguridad de la aviación regional y global, y contribuirá a un mayor desarrollo de la aviación civil y de la humanidad. La participación de Taiwán en la OACI conduciría a una cooperación más estrecha en la industria de la aviación internacional e impulsaría su desarrollo, contribuyendo de tal manera a alcanzar el objetivo de la OACI de lograr un cielo seguro y sin fisuras.